TECNOLOGIA

La nave espacial de rayos X lanzada el sábado tiene como objetivo desentrañar la evolución del universo.

Un nuevo satélite diseñado para analizar la luz de rayos X en el espacio se lanzará el 26 de agosto.

Misión de espectroscopia e imágenes de rayos X (XRISMA – pronunciado "navidad") combina la NASA, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA). Juntos, tienen como objetivo resolver misterios sobre la estructura del universo y la estructura del espacio-tiempo.

Los rayos X emitidos por las explosiones más poderosas y los lugares más calientes del cosmos pueden revelar algunos de estos secretos. Un ejemplo particularmente poderoso involucra a los cúmulos de galaxias, los bloques de construcción más grandes del universo. Estos grupos de galaxias están cubiertos por un gas súper caliente. XRISM detectará la luz de rayos X de este gas, que se utilizará para medir las masas de estos cúmulos. Los resultados proporcionarán nueva evidencia sobre la evolución del universo.

Debido a que el gas es un remanente del nacimiento y muerte de las estrellas, los rayos X arrojarán nueva luz sobre la historia de los constituyentes químicos del universo.

Nave espacial XRISM en la sala de pruebas de vacío térmico