Muere tras ser mordido por su mascota: un monstruo de Gila
Un hombre de Colorado murió tras ser mordido por su mascota: un monstruo de Gila.
Se trataría de una muerte poco frecuente por mordedura de uno de estos lagartos del desierto, si el veneno de la criatura resulta haber sido la causa.
Christopher Ward, de 34 años, fue trasladado a un hospital poco después de ser mordido por uno de sus dos monstruos de Gila el 12 de febrero. El portavoz del Departamento de Policía de Lakewood, John Romero, informó el martes que poco después lo conectaron a un respirador artificial y murió el viernes.
Los forenses del condado de Jefferson declinaron el martes hacer comentarios sobre la muerte. Tampoco dijeron si las pruebas mostraban ya si Ward murió por el veneno de la mascota o por alguna otra razón médica.
La novia de Ward entregó el lagarto llamado Winston y otro llamado Potato a la oficial de control de animales de Lakewood, Leesha Crookston, y a otros oficiales el día después de la mordedura.
La novia de Ward dijo a la policía que escuchó algo que “no sonaba bien” y entró en una habitación, donde vio a Winston agarrado a la mano de Ward, según el informe de Crookston.
La mujer dijo a los agentes que Ward “inmediatamente empezó a mostrar síntomas, vomitó varias veces, y finalmente se desmayó y dejó de respirar”, según el informe.
Ward fue ingresado en un hospital con respiración asistida. A los pocos días, los médicos declararon su muerte cerebral.
La novia de Ward dijo a los agentes que habían comprado a Winston en una exposición de reptiles en Denver en octubre, y a Potato a un criador de Arizona en noviembre, según el informe del agente de control de animales. Cuando se le informó que los monstruos de Gila eran ilegales en Lakewood, la mujer dijo a los agentes que los quería fuera de su casa lo antes posible, según el informe.
Los agentes que trabajan con el Departamento de Recursos Naturales de Colorado enviaron los lagartos a Reptile Gardens, a las afueras de Rapid City, Dakota del Sur. También se llevaron 26 arañas de distintas especies de la vivienda a un refugio de animales cercano.
Los monstruos de Gila son reptiles venenosos que habitan de forma natural en partes del suroeste de Estados Unidos y zonas vecinas de México. Sus mordeduras pueden causar un dolor intenso y desmayar a sus víctimas, pero normalmente no son mortales.