PLD califica de preocupante peste porcina que afecta a productores

El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) manifestó su profunda preocupación ante lo que considera un manejo deficiente por parte del gobierno en relación con la Peste Porcina Africana.
Según la organización política, esta crisis ha impactado severamente la alimentación de las familias dominicanas y ha provocado la ruina de miles de productores porcinos en el país.
El PLD, destacando su experiencia en la gestión estatal y su historial en la prevención de esta enfermedad, propuso la implementación de un Plan Nacional de Emergencia para la Erradicación de la Peste Porcina Africana. Dicho plan contempla seis medidas clave:
Establecimiento de un sistema de control estricto para la movilización de cerdos en todo el territorio nacional.
Implementación de un cordón sanitario efectivo en la frontera que impida el movimiento de animales hacia los centros de producción.
Puesta en marcha de un plan de compensación justa, sin tintes políticos, que motive a los productores a reportar casos sin temor a pérdidas económicas.
Garantía de compensación basada en el valor real de mercado para los productores afectados, con el fin de que puedan recuperar sus medios de vida.
Reincorporación de técnicos especializados en sanidad animal para reforzar la erradicación, el monitoreo y el seguimiento de la enfermedad a nivel nacional.
Control de precios al consumidor para mitigar el impacto económico en las familias dominicanas.
Desde la organización política aseguraron que la enfermedad no estaba presente en el país hasta agosto de 2020, cuando, según afirman, se mantenía un control planificado y con respaldo técnico. Actualmente, el PLD sostiene que la Peste Porcina Africana se ha convertido en una enfermedad endémica que ha diezmado la producción porcina nacional, reduciéndola en más de un 60% y provocando el cierre de más de 12,100 granjas. Además, indicaron que la crisis ha generado la pérdida de más de 5,300 empleos directos y ha afectado a alrededor de 20,000 personas vinculadas a la producción porcina.
El PLD denunció que, mientras la producción nacional se desploma, las importaciones de carne de cerdo han aumentado considerablemente, alcanzando un valor de más de 1,072 millones de dólares. Según sus datos, el precio de la libra de cerdo ha pasado de 78 pesos en 2019 a aproximadamente 150 pesos en la actualidad, lo que representa un incremento del 92%. Asimismo, destacaron que la producción local ha pasado de suplir 7 de cada 10 libras de carne de cerdo consumidas en el país en 2019 a solo 2.5 en la actualidad, mientras que la importación ha aumentado un 331.8%.
La organización opositora responsabilizó al gobierno por lo que considera una falta de planificación y respuesta ante la crisis, argumentando que:
Se despidió a más de 700 técnicos especializados en sanidad animal, quienes desempeñaban un rol clave en la vigilancia y asistencia a los productores.
Se negó inicialmente la existencia de la enfermedad cuando fue detectada en abril de 2021, lo que facilitó su propagación a 11 provincias.
La ausencia de un programa de compensación adecuado ha llevado a los productores a ocultar casos por temor a pérdidas económicas.
No se ha implementado un plan nacional con rigor técnico para erradicar la peste porcina.
El PLD reiteró su solidaridad con los productores afectados, afirmando que la crisis no solo compromete la producción porcina, sino que también golpea a miles de familias que dependen de esta actividad. En ese sentido, criticó que el gobierno intente culpar a los pequeños y medianos productores, cuando, a su juicio, la responsabilidad recae en las autoridades encargadas de aplicar las políticas sanitarias necesarias para controlar la enfermedad.
El partido recordó que el artículo 54 de la Constitución establece la obligación del gobierno de garantizar la seguridad alimentaria, por lo que instó a las autoridades a acoger las propuestas presentadas. Finalmente, señaló que la crisis porcina no es solo un problema agropecuario, sino una problemática social que afecta la soberanía alimentaria del país, el bienestar de los ciudadanos y la estabilidad económica de miles de familias dominicanas.